sábado, 10 de mayo de 2008

A tus pies, Frank

Si hay una constante que nos acompaña a lo largo de nuestras vidas, esa es el deterioro. Todo en nuestras vidas se deteriora. Desde el aspecto físico, pasando de la niñez a la vejez, hasta el aspecto intelectual, pues a lo largo de los años ciertos ideales se van perdiendo y se vienen abajo por distintas razones. Pero no sólo los seres humanos: Todo lo que nos rodea. Absolutamente todo, comenzando por una amistad, siguiendo por el amor y terminando con el lugar en el que vivimos. La gente entra y sale de nuestras vidas de distintas maneras y para marcarnos de distintas formas, ya sean buenas o malas. Sufrimos en demasiadas ocasiones por las pérdidas, y si hay algo que es cierto es que no se aprecian de verdad las cosas hasta que se pierden. Pues dentro de un par de semanas el barcelonismo echará de menos a una de las personas a las que, dentro del mundo del fútbol, más respeto guardo. No por los títulos ni por los grandes momentos, sino por las malas experiencias que ha vivido y lo que ha aguantado y lo que ha luchado por un equipo por el que él, cuando llegó, no tenía ningún tipo de sentimiento afectivo. Nunca dio una palabra más alta que otra. Sus declaraciones, su manera de ser, de actuar y de pensar y todo lo que ha aguantado nos hacen ver a todos que, dejando de lado sus cualidades en su trabajo, tiene una serie de cualidades que, a día de hoy en el fútbol, se están perdiendo.

Porque al bueno de Frank se le podría definir de esa manera: Una buena persona. No suena tan bien como podría esperarse, pero a día de hoy buenas personas de verdad se pueden contar con los dedos de las manos. Y dentro del mundo del fútbol, con los de una sola mano quizá basten. Una persona que ha representado al barcelonismo dando ese talante de caballero, de persona serena, amable y cordial con cualquiera persona es muy importante dentro de la historia blaugrana. Una persona que, ante las provocaciones de Jose Mourinho, pidió a los culés que supiesen reconocer su trabajo... Un caballero. Pero probablemente por el hecho de ser una buena persona, ha sido alejado de su trabajo.

No vamos ahora a ponernos una venda en los ojos y a decir que lo hizo todo bien y la situación actual del club es problema de todos excepto de él. Frank tenía unos ideales, una manera de actuar que los jugadores entendieron pero que el famoso deterioro, agravado por ciertos choques de egos, ha acabado por acabar con él. Sería una tontería también decir que nunca trató de cambiar nada. Ha hecho cambios, ha evolucionado a lo largo de las temporadas que ha estado aquí y le ha dejado al barcelonismo un ejemplo de caballerosidad y de comportamiento. Les ha dado una lección a todos: Desde el presidente a los jugadores. Quizás el hecho de que haya aguantado estoicamente todos los problemas que se le han puesto por delante y el hecho de que cada vez que salía una noticia del Barcelona nunca aparecía su nombre con letras grandes hayan ayudado a lo que espero que sea la mejor fiesta de despedida que hayamos visto jamás ante el Mallorca.

El hecho de que le hayan traicionado y de que no haya cambiado su estado de serenidad aumenta todavía más la gran imagen que tenemos suya. El hecho de que haya logrado que prácticamente nadie crea que él era el problema nos dice aún más de lo que piensa el soci de a pie. Como en una película sumergida de lleno en el maniqueísmo, Rijkaard es el hombre del que todos se aprovechan y quien, al final, se va por la puerta de atrás, mientras Laporta es esa figura oscura que, a día de hoy, ya se ha cargado a las dos personas a las que más debería agradecerle lo que debería haber sido la etapa más gloriosa del barcelonismo: Sandro Rossell y el propio Rijkaard. A Sandro se lo cargó por diferencias entre ambos. Con él se fueron un gran vicepresidente, un director deportivo único y, en general, una persona que entendía mucho de fútbol. Si miramos los fichajes que después se hicieron y los comparamos con los que se hicieron durante su estancia en el club azulgrana comrpobaremos que la diferencia es abismal. A Rijkaard se lo ha cargado para continuar con sus particulares cortinillas de humo. ¿O no os acordais de cuanto tiempo tardó en llegar Henry después de que el Barcelona quedara segundo empatado a puntos con el Madrid?

Con Laporta sigue una de las deficiencias más grandes del barcelonismo que no sé por qué razón nadie sabe solucionar: Homenajear a quien se lo merece. ¿Os acordais de como se fue Rivaldo?¿Y de cómo se fue Luis Enrique?¿O Cocu?¿Qué me decís de cómo se fue en su momento el que la próxima temporada será el entrenador? Y de ahí hacia atrás hay un enorme historial de ejemplos. Es triste, pero es así: El Fútbol Club Barcelona no ha sabido dar el reconocimiento que se merecían los jugadores que marcaron una época en el club. En el Barcelona, exceptuando a Cruyff que a veces tengo la impresión que lleva en el Barça desde siempre, se puede llegar como una estrella y salir por la puerta de atrás, pero nunca lo contrario.

Así, pues, mis mejores deseos para Rijkaard. Tal y como dice el cantante Mika en un tema suyo: This is the hardest story that I've ever told, no hope, or love, or glory, happy endings gone forever more. Las cosas van y vienen. Pero las personas así marcan la historia de un club. Tanto que te estamos echando de menos y todavía no te has ido. Así que tan sólo me queda rendirme a tus pies. Porque no te mereces lo que te han hecho. Pero lo cierto es que nosotros tampoco te merecemos. Muchas gracias, Frank, y suerte allá donde vayas en todo lo que hagas. Porque lo mereces.

viernes, 2 de mayo de 2008

Sensaciones de las semifinales europeas

Unas semifinales de Champions no dejan indiferente a nadie. Unas de UEFA, tampoco. Y más teniendo en cuenta de la cantidad de cosas de las que se pueden hablar y de la cantidad de resultados que se han dado. Sólo ha faltado que pasara alguien por goles en campo contrario, porque hemos tenido triunfos en 90 minutos por la mínima. en 120 por la mínima también, en los penaltys, una goleada... De todos los tipos y para todos los públicos. Ahí os dejo varias cosas, algunas con ánimo de polémica, que me han venido en mente antes, durante o después del partido:

- ¿Por qué la gente dice que el Barça fue más y mejor que el Manchester United en toda la eliminatoria?¿Quién tuvo las ocasiones claras de gol y quién se dedicó a marear la perdiz y a crear peligro sin ocasiones claras? Seamos sensatos: Si no llega a ser porque parecía que a Deco le debía doler en el alma no estar en la final, el Barcelona sólo habría vivido del peligro que generaba Messi. Y como era sólo peligro...

- Igualmente tampoco entiendo por qué hay gente que niega una realidad que es clara y evidente: Cristiano Ronaldo en los partidos verdaderamente importantes todavía no ha tenido ninguna gran actuación. Ayer volvió a no estar a la altura de las circunstancias y van... ¿Marcó el primer gol contra la Roma en el Olímpico? Sí, pero también Jose Ignacio marcó en su día el 1-2 que daba la victoria al Celta en Milán y nadie dirá que se salió en ese partido el riojano... Marcar un gol no lo es todo en un jugador de sus características. Hasta que no tenga una gran actuación...

- Avisó Zidane tras el Mundial que una portada del diario MARCA les picó antes del partido ante España y fue una motivación extra para ese partido. Finalmente llegaron a la final y sólo los penaltys le privaron del gran título. A Drogba le ha pasado lo mismo contra el Liverpool. Benítez le picó, y él respondió demostrándole al técnico del Liverpool por qué está considerado como uno de los mejores jugadores, ya no digo delanteros, del mundo.

- Decía al final del partido un comentarista inglés en referencia a Avraam Grant: ¿Who is the special one now? No me parece justo para Mourinho decir que el Chelsea sin él ha llegado a la final, porque este Chelsea es el Chelsea de Mourinho. Misma plantilla, mismo sistema... Cambia la recuperación de Ballack y poco más... Porque es una versión muy similar al Chelsea de Mourinho. Supuestamente es peor que el Chelsea de Mourinho, pero la posibilidad de este doblete nunca la habían tenido tan cerca los blues.

- Segundo año en blanco del Liverpool de Benítez. Van no sé cuantos años que no luchan por la Premier. Y todos estos años ha ocurrido lo mismo: Se han generado muchas expectativas que se han vuelto a alimentar a finales de año en Europa. Pero luego empieza la temporada... Y nada de nada. Benítez será un gran estratega, pero eso en un entrenador no lo es todo. Si a esto no lo acompaña una buena gestión de una gran plantilla, no hay plantilla como para haber luchado por entrar en Champions hasta hace un par de semanas, no vale de nada. Y hay otros que, habiendo ganado más que Benítez en menos tiempo, por no ganar títulos en 2 años están destituidos extraoficialmente y en su equipo se habla de crisis.

- El Chelsea llega fuerte de cara a la final y al Manchester United le comienzan a temblar las piernas. El Chelsea básicamente porque en su plantilla hay jugadores que podrían correr días enteros sin llegar a cansarse. Y el Manchester United... Sus últimos partidos plantean un mar de dudas. Que Ferguson haya jugado al catenaccio últimamente no habla muy bien del equipo más ofensivo de Europa. O bien está nervioso porque teme la calidad de sus rivales y sigue merodeando el espíritu Milan que les aguó la fiesta el año pasado o bien es consciente de que su equipo no está bien y ha decidido que esa era la manera más inteligente de jugar sin arriesgar.

- Se habla siempre de que la justicia en el fútbol no existe y que muchas veces se dan resultados que casi llegan a ser crueles por lo visto en el terreno de juego. Lo de la Fiorentina en la vuelta de las semifinales de la Copa de la UEFA entraría dentro de ese grupo de resultados casi crueles. Pero seamos realistas: ¿Cómo va a llegar a la final un equipo que dominando, creando ocasiones de gol y chutando a puerta es capaz de acumular la escandalosa cifra de 29 tiros y cómo puede ser que de esos 29 tiros sólo 4 vayan entre los tres palos? ¿Mala suerte? No. Mala puntería. Pésima puntería, para ser más concretos.

- Retomando el tema, se habla siempre de que en el fútbol no existe la justicia.. Viendo cómo el Bayern creaba ocasiones en San Petesburgo pero que entre la puntería y la actuación de Malafeev no entraba ningún gol y que cada contraataque que armaba el Zenit era un gol... Qué impotencia debieron sentir los alemanes. Parecida a la del Getafe en la anteriores semifinal, pero esta vez con humillación en vez de crueldad. En ambas eliminatorias pasó el mejor, en la primera porque marcó 3 goles fuera de casa y en la segunda por el simple hecho de que goleó. Si el Bayern llega a aprender a sentenciar los partidos en casa en vez de echarse la siesta...

- Por otra parte, se podría decir que el Glasgow Rangers es un finalista indigno habiendo visto sus últimos 3 partidos en la Copa de la UEFA. Cada equipo aprovecha sus armas, porque no todos los equipos disponen de las mismas armas. Y si sabes que plantándole cara al rival vas a salir mal parado, no le plantes cara. Escóndete en la cueva y deja a alguien agazapado por si se puede meter la ocasión que se tendrá, porque solamente si la racanería es máxima no se tendrá ninguna ocasión, y suena la flauta. Y el Rangers no era favorito, bajo mi punto de vista, desde la eliminatoria ante el Werder Bremen, allá por octavos de final. Y están en la final. Así que tan indignos no serán, ¿no?

- En la final de la UEFA se enfrentarán estilos completamente distintos. Casi se podría decir que son la luz y la oscuridad. La luz sería el Zenit y la oscuridad el Rangers. Y a todos nos gusta la luz, hasta el hecho de que mucha gente, todo el mundo diría yo, le tiene miedo, en mayor o menor medida, a la oscuridad. Pero en esto del fútbol, por unas razones u otras, casi siempre acaba ganando la oscuridad. No pondré ejemplos, porque hay tantos...